Películas analizadas.

[Animo: Castroso <_-_>]
[Escuchando: Haruka Kanata - Asian Kung-Fu Generation]

Ayer fui a casa de Alhelí con Lu y sus hermanos a ver películas. Filmes que en mi vida había visto, y lo peor de todo... de Disney, y no lo digo porque Disney sea una porquería (bueno...), sino porque no he visto ni siquiera la mitad de sus Clásicos (leáse El Caldero Mágico, Fantasía, Pinocho, etc.). Tal conmoción causó la noticia que hasta mi suegro me miró fijamente incrédulo y dijo "¿Que no tuviste infancia?". En ese momento sentí que el mundo se me venía encima.

"NOOOOOO! No puede ser!", me decía a mi mismo y me reprochaba de no ser un Disney-boy como cualquier otro en mi época. Como lo leen. No fui un chico Disney hasta La Bella y la Bestia y La Sirenita. No sé qué fregados hacía en mis tiempos libres (oh, ya recuerdo! me la pasaba en casa haciendo desmadre y medio, sacando a relucir mi tan afamada hiperactividad: era imposible estar sentado, quieto y viendo la tele al mismo tiempo). Así que ni por aquí *paso mi mano sobre mi frente* de la existencia de Walter Elias Disney... No, no es cierto. Sí sabía de su existencia, pero era gracias a sus "Fantasías animadas de ayer y hoy..." UPS! Serie equivocada! A ver otra vez: "El cielo resplandece a mi alrededor..." No! Wrong! Autor equivocado. ¿Cómo era? ...

Aah! Ya recuerdo!...

Disney no tenía introducción en sus series clásicas (llámense "series clásicas" a todo lo que tenga qué ver con El Ratón Miguelito, El Pato Pascual, y Tribilín... un momento. Pascual... Pascual... ¿Que ese pato cascarrabias, amargado y profundamende sumido en su propio odio por no ser "Gansito" Marinela <¡qué orgullo!> no era la simplota y estúpida mascota de las bebidas BOING?). La única introducción era una animación del Castillo de Disneyland (uno de mis muchos sueños frustrados de infancia de los cuales hablaré después) con una tonadita pegajosa y molesta.

Aún así, las películas analizadas el día de ayer fueron:
+La Bella Durmiente
- Cosas más importantemente analizadas: Maléfica era sadomasoquista y una dominatrix en la cama que quería dárselo con el Príncipe "Jelipe" (¡qué nombre tan fresa para un príncipe pepenche!)

+La Espada en la Piedra
- Cosas más importantemente analizadas: A Arturo (llamado "Grillo") lo convierte el Gran Mago Merlín *me inclino* en pescado, en ardilla (que por cierto, hay escenas eróticas en ese episodio) y en pájaro. Casi que lo convierte en absolutamente todos los animales, menos en grillo. Alguien déle un zape, y no a Merlín (él no se toca!) sino al mismo Arturo, un chamaco enclenque y ñango (más, mucho más que yo... no... esperen... No era tan ñango... Podía hacerla de escudero!) que no tiene ni la más remota idea de qué es un avión, pero sí de su forma.

+Robin Hood
- Cosas más importantemente analizadas: Posiblemente el largometraje con más contenido erótico (y aún más... ¡Homoerótico!) y el que más se ha apegado a la verdadera naturaleza gay de Robin Hood que se haya hecho, por varias razones.
>>La relación de Little John con Robin Hood era muy "especial". Se puede ver en varias ocasiones a Little John con un delantal como sirvienta francesa de Robin, y haciendo insinuaciones al llamado "Príncipe de los Ladrones".
>>La personalidad afeminada del Principe John, un "pelele" (alguien que me diga el significado de esa palabra, antes que lo determine yo) con un grave caso de mamitis aguda y con un materialismo también muy marcado (dudo si también tenía tendencias sadomasoquistas y fetichistas)
>>El Sheriff de Nottingham... un oso gay apenas salido del clóset, enfrentándose a la realidad.
>>La tan especial relación entre una gallina y una zorra (si, zorra en toda la extensión de la palabra)... Una ga-lli-na y una zo-rra... A menos que haya algo "escondido por ahí".
>>Relaciones extrañas y especiales, y un león que tiene una zorra como sobrina, son cosas que me hacen dudar de la verdadera vocación de W. E. Disney.

Son muchas cosas más que se analizaron. Sólo esperen que no me multen o me metan a la cárcel (o peor, que me metan a la carcel con el Sheriff... El horror. EL HORROR!) y que algún fan de Disney logre leer esto.

Que mamón fui.